EDITORIAL Caricatura Editorial Columnas editoriales

Columnas

Imparable la migración a Estados Unidos

JOSÉ SANTIAGO HEALY

Los gobiernos mexicanos han sido muy exigentes a la hora de reclamar a Estados Unidos por los abusos en contra de los migrantes mexicanos, pero les cuesta trabajo reconocer que la falta de empleos y ahora la ausencia de paz obliga a miles de ciudadanos a cruzar al norte sin importar los peligros y el sufrimiento.

Para colmo en los últimos años se han incorporada a la migración de México miles de ciudadanos de países latinoamericanos y también de naciones lejanas.

De enero a noviembre del 2023 llegaron a territorio mexicano aproximadamente 686,732 inmigrantes sin documentos legales, según datos de la Secretaría de Gobernación.

De esa cantidad se contabilizaron en números redondos 194 mil migrantes irregulares de Venezuela, 106 mil de Honduras, 72 mil de Guatemala, 60 mil de Ecuador, 41 mil de Haití, 24 mil de Cuba y 23 mil de Colombia.

Menos del diez por ciento fue regresado a sus países, el mayor porcentaje corresponde a hondureños y guatemaltecos, pero el resto de los migrantes --unos 550 mil-- o cruzaron a Estados Unidos o bien se quedaron en México. Las autoridades norteamericanas calculan que tanto en el año fiscal del 2022 como en el 2023 fueron detenidos más de dos millones de migrantes en la frontera mexicana lo que marca un récord nunca antes visto.

Solo en el pasado mes de diciembre se registró la detención de 235 mil personas, algo así como 8,400 migrantes capturados cada día por la policía fronteriza.

Resulta difícil de cuantificar las nacionalidades de los migrantes detenidos, pero tomando en cuenta los datos de México bien podría calcularse que dos terceras partes son mexicanos y el resto de otros países, en especial de América Latina.

Esto revelaque las corrientes migratorias del sur de México han crecido de manera alarmante lo que evidencia la falta de voluntad del gobierno de López Obrador de frenar este fenómeno a diferencia de lo ocurrido durante el régimen de Donald Trump.

Al mismo tiempo el gobierno de Joe Biden ha dado facilidades insólitas para el cruce de indocumentados lo que ha puesto muy nerviosos a los norteamericanos en especial a los que habitan en estados fronterizos como Texas y Arizona que aborrecen la inmigración ilegal a diferencia de California.

Bajo este panorama es entendible que surja una ley antiinmigrante y racista como la SB4 en Texas que convierte en delito estatal el ingreso ilegal a dicho estado y permite arrestar y deportar a quienes la violen. Afortunadamente la ley, promulgada en diciembre por el gobernador Greg Abbott, fue suspendida temporalmente por una corte federal, pero desató declaraciones incendiarias de ambos lados del horizonte político.

La canciller mexicana Alicia Bárcena declaró que "nuestros migrantes en Estados Unidos no son delincuentes" y que su aportación a la economía supera los 300 mil millones de dólares al año.

En tanto el aspirante presidencial Donald Trump volvió a su posición extrema al señalar que algunos de los criminales que cruzan la frontera no se les puede llamar personas, "creo que en algunos casos no son personas… son animales". Semanas atrás dijo que ciertos inmigrantes "envenenan la sangre del país".

De aquí a las elecciones presidenciales del vecino país presenciaremos una guerra de afirmaciones en el tema migratorio donde ni México ni nuestros paisanos saldremos bien librados. El tema migratorio se ha metido de lleno en la contienda electoral.

El gobierno mexicano tendrá que tragar gordo ante el bataclán que observaremos, sin embargo, es tiempo que aceptemos nuestra responsabilidad en este conflicto y que se pongan las condiciones para frenar la migración irregular de mexicanos y extranjeros al norte.

Los gobiernos de Venezuela y Cuba están felices de expulsar a sus paisanos a Norteamérica vía nuestro territorio porque se ahorran así alimentos, energéticos y protestas.

Miles de sudamericanos están adoptando a México como nación lo cual sería positivo siempre y cuando este proceso se realice de manera organizada y legal. En algunas poblaciones de México la inmigración ha sido positiva, pero en otras está generando serios conflictos sociales.

LLUVIA DE ENCUESTAS

Parece sospechoso que a mediados de marzo se divulgaron varias encuestas en donde la candidata oficial Claudia Sheinbaum supera por amplio margen a la aspirante del frente opositor Xóchitl Gálvez. Existen dudas sobre la validez de algunos sondeos porque el porcentaje de indecisos y de no respuestas es muy alto, pocos advierten que con todo y diferencias la hidalguense creció en popularidad en los primeros días de campaña.

Leer más de EDITORIAL

Escrito en: editoriales columnas

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de EDITORIAL

TE PUEDE INTERESAR

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 2282842

YouTube Facebook Twitter Instagram TikTok

elsiglo.mx