Después de permanecer "dormido" por seis años, despertó el Padre Nazas para correr de nueva cuenta por su cauce natural. Se trata de la séptima avenida de los últimos 64 años. Aunque la liberación del agua inició con un gasto de 60 metros cúbicos por segundo, se incrementó hasta los 100 metros cúbicos por segundo, según reporte de Conagua.