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A primera hora del viernes se escucharon explosiones en la capital ucraniana de Kiev, mientras las fuerzas rusas seguían adelante con una invasión a gran escala que provocó la muerte de más de 100 ucranianos en el primer día completo de combates y que podría acabar reescribiendo el orden de seguridad mundial posterior a la Guerra Fría.
"Los ataques contra Kiev con misiles de crucero o balísticos se reanudaron. He escuchado dos fuertes explosiones", dijo el viceministro ucraniano de Interior, Anton Herashchenko, citado por la agencia francesa de noticias AFP.
Después de utilizar ataques aéreos contra ciudades y bases militares, las unidades militares rusas se han movido rápidamente para tomar la sede del gobierno de Ucrania y su ciudad más grande, en lo que los funcionarios estadounidenses sospechan que es un intento descarado del presidente ruso Vladimir Putin de desmantelar el gobierno y reemplazarlo con su propio régimen.
Los líderes ucranianos pidieron ayuda mientras los civiles se subían a trenes y automóviles para huir, y los hoteles de Kiev estaban siendo evacuados en medio de las primeras señales de un ataque.
Las fuerzas ucranianas se preparaban para más ataques luego de soportar una andanada rusa de misiles lanzados desde tierra y mar, un ataque que un alto funcionario de defensa estadounidense describió como la primera de varias fases de una invasión destinada a tomar centros de población clave y, en última instancia, “decapitar” al gobierno de Ucrania. Las autoridades ucranianas dijeron que ya habían perdido el control de la central nuclear de Chernóbil, escenario del peor desastre en una planta atómica en el mundo.
Horas antes, Volodímir Zelenski, informó de la muerte de 137 ucranianos durante el primer día del ataque ruso contra el país.
"Según datos preliminares, lamentablemente hemos perdido ya 137 de nuestros héroes, nuestros ciudadanos, diez de ellos oficiales. 316 resultaron heridos", dijo el mandatario en una nueva alocución a la nación.
"Hoy Rusia atacó todo el territorio de Ucrania. Y hoy nuestros defensores han hecho mucho", dijo.
"El enemigo ataca no solo las instalaciones militares, como afirma, sino también civiles. Matan a gente y convierten a ciudades pacíficas en objetivos militares. Esto es vil y nunca será perdonado", recalcó.
Zelenski también desmintió que hubiera abandonado Kiev.
"Estoy en la capital, mi familia también está en Ucrania", recalcó.
"Según nuestra información, soy el objetivo número uno del enemigo. Mi familia el segundo. Quieren destruir Ucrania políticamente al destruir el jefe de Estado", afirmó.
Dijo también disponer de datos sobre grupos de sabotaje enviados por Rusia a Kiev.
"Pido a los kievitas tener cuidado, a seguir el toque de queda. Yo permanezco en el barrio gubernamental con todos aquellos que son necesarios para el trabajo del Gobierno central", recalcó.
Zelenski volvió a lamentar que nadie le haya dado una respuesta clara sobre las aspiraciones de Ucrania de integrarse en la OTAN.
"Nos dejaron solos en la defensa de nuestro Estado. ¿Quién está preparado para luchar a nuestro lado? No veo a nadie. ¿Quién está preparado para garantizar la adhesión de Ucrania a la OTAN? Todos tienen miedo", recalcó.
El presidente ucraniano sostuvo, tras escuchar que Moscú -pese a la ofensiva militar- aún quiere dialogar sobre el estatus neutral de Ucrania para que no se sume a la OTAN, que no él no tiene miedo.
"No tenemos miedo a hablar con Rusia. No tenemos miedo a hablar sobre garantías de seguridad para nuestro Estado. No tenemos miedo a hablar sobre el estatus neutral. Pero ¿tendremos garantías de seguridad? ¿Qué países nos las darán?", se preguntó.
Zelenski sostuvo que ahora mismo es necesario hablar del "fin de esta invasión" y de un "alto el fuego".