Bajo el lema Con los libros abiertos, del 13 al 17 de marzo de 2024, la edición XIV de la Feria Universitaria del Libro UANLeer se llevó a cabo en el Colegio Civil de Monterrey. Bajo la organización de la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL), el encuentro literario se ha convertido en un espacio importante a nivel nacional para el acercamiento de la lectura hacia los jóvenes. Su historia se remonta al año 2010, cuando se efectuó por primera vez en el patio de la Casa Universitaria del Libro, un antiguo edificio de 1924 diseñado por el arquitecto Eduardo Daniel Belden, ubicado en el centro de Monterrey y considerado una de las siete maravillas del estado de Nuevo León. De ahí, la feria se trasladó a la explanada de Ciudad Universitaria de la UANL, para finalmente consolidarse en el Colegio Civil.
En 2024, la organización optó por una edición dedicada a los editores y con amplia presencia de poesía. Como invitado de honor se tuvo a Altexto, la red de editoriales universitarias y académicas de México; como institución invitada a la Alianza de Editoriales Mexicanas Independientes (AEMI) y como ciudad invitada a Guadalajara. Además, se le entregó el reconocimiento al mérito editorial a Martha Esparza Ramírez, editora, pedagoga, diseñadora y exjefa del Departamento Editorial de la Universidad Autónoma de Aguascalientes (UAA). Los números arrojaron una asistencia de 30 mil personas en sus cinco días de duración. Se convocó a 50 grupos editoriales, se celebraron los 90 años del poeta y crítico Gabriel Zaid y el aniversario 80 de la revista cultural Armas y Letras, además de presentaciones relevantes como una antología del poeta Pedro Garfias.
Entre el resto de expositores destacaron editoriales como An.alfa.beta, Océano-Anagrama, Sexto Piso, Planeta-Paidós, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), El Colegio Nacional, Tilde, Vaso Roto, entre otras. Otra presencia fue el cine, pues en colaboración con el Festival Ternium de Cine Latinoamericano, se estrenó en el Aula Magna la película Todos los incendios (2023), de Mauricio Calderón Rico.
LA SEDE
En 1794, gracias a la orden del obispo Andrés Ambrosio de Llanos y Valdés, comenzó a construirse el Hospital de Nuestra Señora del Rosario (sobre lo que ahora es la calle de Colegio Civil, entre Washington y 5 de Mayo). Encargado al arquitecto francés Jean Crouset, el proyecto fue suspendido de manera definitiva en 1797. Medio siglo más tarde, el inmueble se destinó a la milicia.
Fue en 1857 cuando Santiago Vidaurri, entonces gobernador de Nuevo León, decretó la creación del Colegio Civil a un costado de la Catedral de Monterrey. El proyecto fue continuado por José Silvestre Aramberri, gobernador en 1859. Los cursos del colegio se trasladaron en 1870 al inmueble inconcluso del Hospital de Nuestra Señora del Rosario. Convertido en un centro de conocimiento, de sus aulas emergieron las mentes más importantes de Nuevo León, como el escritor Alfonso Reyes o el político Raúl Rangel Frías. Fue sede de la Universidad de Nuevo León, al crearse la institución en 1933. Sin embargo, durante los años sesenta, la Rectoría y las facultades fueron trasladadas a Ciudad Universitaria. El inmueble entonces se ocupó por la Preparatoria No. 1 y la Preparatoria No. 3, pero llegó al siglo XXI en malas condiciones.
Ante el valor histórico de su arquitectura, el 2 de abril de 2004 se echó a andar un ambicioso proyecto de restauración. Las tareas corrieron a cargo de la Dirección de Mantenimiento y Construcción, con el ingeniero José Luis Martínez Cuéllar al frente. Por su parte, la coordinación del proyecto fue responsabilidad de los arquitectos Elisa Rangel Sánchez Borges y Juan Manuel Casas García . La museografía recayó en el arquitecto Jesús Pedro Morúa Alonso y se contó con la asesoría del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH). El Colegio Civil Centro Cultural Universitario fue inaugurado el miércoles 31 de enero de 2007.
Los espacios que actualmente conforman al inmueble Universitario son el Aula Magna Fray Servando Teresa de Mier, la Sala Francisco Zertuche, la Sala de Exposiciones Temporales, la Sala de Proyecciones Cinema Fósforo, la Sala Acristalada Sur, el Patio Sur, el Patio Norte, el Aula de Música, la Librería Universitaria y la Pinacoteca de Nuevo León.
UANLeer trata de aprovechar cada uno de estos espacios. Las presentaciones principales se realizan en el Patio Sur y Patio Norte. También se emplean las distintas salas. Mientras que el aula magna alberga a la Gala Poética y los expositores se distribuyen por los pasillos de los patios y la planta alta.
Respecto a los sitios de exposición, la feria inauguró la muestra fotográfica Rostros de la literatura mexicana. Cinco artistas de la lente, en la planta alta del Patio Norte, y Caligrafía de lo improbable. Cerámica de Ricardo Escobedo, en la Sala Acristalada, en la planta alta del Patio Sur. Estas convivieron con Montenegro Cantú Ceniceros. Patrimonio Artístico Monumental y Fernando Botero Arcángel. También se realizaron actividades de extensión en la Casa Universitaria del Libro, como el taller de narrativa con el escritor peruano Gustavo Rodríguez (Premio Alfaguara de Novela 2023) y el taller de poesía con el mexicano Luis Armenta Malpica (fundador de Mantis Editores).
LECTURA Y ESTUDIANTES
En entrevista exclusiva con Siglo Nuevo, Antonio Ramos Revillas, director de la UANLeer, compartió que el principal público del encuentro es el estudiantil y luego la ciudadanía en general. La feria está pensada para formar lectores e incentivar la capacidad del ser humano para preguntar. Por tal motivo, las más de 30 preparatorias pertenecientes a la UANL envían a sus estudiantes, quienes provienen del área metropolitana de Monterrey, así como de otros municipios aledaños.
“Siempre he dicho en las reuniones con los directores de las preparatorias: estas ferias del libro y las mismas preparatorias, son el último espacio donde mucha gente va a tener acceso a este tipo de libros; una vez que salen de la preparatoria, (los jóvenes) ya se concentran en sus lecturas de carrera: leen libros de medicina, de ingeniería, pero muy pocos darán el salto a mirar hacia otro lado”.
Por ejemplo, el jueves 14 de marzo se pudo apreciar la presentación del libro A punta de retratos (Cantamares, 2022), del autor francés Yves Pagès, realizada en colaboración con la Alianza Francesa de Monterrey. Gracias a la traducción de Andréa Bruccoleri, los estudiantes pudieron interactuar con el autor e indagar sobre su ejercicio creativo, además de que cada uno de los jóvenes pudo llevarse un ejemplar gratuito.
“Los públicos que traemos a UANLeer no son traídos porque sí. Hacemos un estudio, vemos en qué prepas hay clubes de lectura, invitamos a los chicos de clubes de lectura. Y si no son de clubes de lectura, en la medida de lo posible acercamos los libros a todo el salón, para que al menos vean la portada o la contraportada del libro. No los puedes obligar a leer, pero poner el libro en acceso es algo que hacemos mucho. Por ejemplo, ahorita está Ana García Bergua presentando su libro y están chicos de una secundaria de Zuazua (Nuevo León), que se juntaron para la presentación. Les dimos sus libros y están aquí disfrutando leer; saben de lo que se habla, ya no son públicos pasivos, sino que son públicos que se involucran”.
Otro de los eventos clave de UANLeer 2024 fue la gala poética. Acontecida el viernes 15 de marzo en el Aula Magna, se trató de un recital de poesía a cargo de voces como Luis Miguel Aguilar, Coral Bracho (Premio FIL de Literatura en Lenguas Romances 2023), Eduardo Langange, José Luis Rivas y Silvia Tomasa Rivera. Además, durante el encuentro literario, los estudiantes pudieron convivir con otros autores como María Baranda, José Ángel Leyva, Margarito Cuéllar, Fabián Espejel, Franco Félix, Liliana Blum, Gabriel Bernal Granados, Hiram Ruvalcaba, Román Cortázar, Óscar Bonilla, Ricardo Barba, Claudia Berrueto, Brenda Elizondo, Raúl Quintanilla Alvarado, Luis Armenta Malpica, etcétera.
“Creo que este año hemos dado nuevos pasos para que el proceso de organizar sea mejor. Hemos reforzado ciertas áreas, justo las involucradas con los estudiantes, con el acercamiento de la comunidad universitaria. Hemos ideado nuevos proyectos. Esta cuestión de las AFIs (Actividades de Formación Integral) para maestros, nunca la habíamos tenido, este es el primer año que la hicimos y ha funcionado bien”, cerró Antonio Ramos Revillas.