Aproximadamente mil personas viven en las comunidades que registraron presencia de nieve.
La mañana del martes, el paisaje se cubrió de blanco en varias localidades de la Sierra de Durango.
Habitantes de la comunidad de La Rosilla, en el municipio de Guanaceví, vivieron una fría mañana con presencia de nieve en esta zona que ha sido identificada como "el congelador de México" porque constantemente registra las temperaturas más bajas del país.
Asimismo, en las comunidades de Ciénega de la Vaca, El Cebollín y El Cedro, entre otras, también de ese municipio serrano, así como de Tepehuanes, se reportó la caída de nieve por parte de la Coordinación Estatal de Protección Civil (CEPC).
El titular de la dependencia, Arturo Galindo Cabada, informó que, como se había pronosticado, y derivado de las condiciones de humedad que se registran en la parte norte de la Sierra, desde el inicio de la semana hubo aguanieve y empezó a nevar la mañana de este martes.
"Son comunidades que están a 2,800 metros sobre el nivel del mar y en La Rosilla que está a 2,770 sobre el nivel del mar también se presentó algo de nieve", estableció.
En tal sentido, expuso que en alrededor de 20 comunidades que están a más de dos mil 500 metros sobre el nivel del mar, de los municipios de Guanaceví y Tepehuanes, se registró la caída de nieve de entre una pulgada y una pulgada y media o hasta dos, a lo largo del martes.
SE MANTIENEN EN ALERTA
Aproximadamente mil personas viven en estas pequeñas comunidades que registran las más bajas temperaturas por lo que se mantienen en alerta para auxiliarlos en caso necesario.
"Creemos que no se va a extender más allá de aquella zona; sin embargo, nos mantenemos en alerta con las Coordinaciones Municipales; sobre todo nos interesa mucho que no se vayan a quedar incomunicadas estas comunidades y, en caso de que así sucediese, estar atentos por alguna emergencia que se pudiera presentar", complementó.
Asimismo, estableció que también representa una preocupación el pronóstico de vientos de hasta 90 kilómetros por hora.
Y es que en la mayor parte de la Sierra no ha llovido, por lo que otra problemática que se registra son los incendios, precisamente por los fuertes vientos.
Principalmente se han adelantado los incendios a la temporada en Mezquital, Durango y Pueblo Nuevo, por la sequía que hubo en 2023.