Muere Aristeo “Teo” Caldera, legendario Bat Boy y figura querida del Beisbol Lagunero
La inconfundible arenga de “Pleito, pleito”, no volverá a sonar en los diamantes de la Comarca Lagunera. El luto invadió este domingo a la pelota regional, al darse a conocer el fallecimiento de Aristeo “Teo” Caldera, quien hasta hace apenas unos días, se desempeñó como bat boy de diversos equipos, en los que resaltaba la “pimienta” particular de un personaje inolvidable.
Fue en las calles de su propio barrio, donde “Teo” este domingo dio su último suspiro y partió a su encuentro con el Señor, de manera sorpresiva, pues aunque había estado aquejado por diversos malestares en el pasado reciente, no parecía tener ninguna afectación que pusiera en peligro su vida. Sin embargo, para este peculiar bat boy, cayó el último out en este plano terrenal, y se despide dejando un legado de amor por el beisbol, por el softbol, por la vida misma, pero sobre todo, por los protagonistas del juego, pues siempre fue una persona respetuosa y que solía preguntar al pelotero, más allá de su promedio de bateo o su efectividad en el pitcheo, sobre su familia o su estado de ánimo, lo que dejó marcados a muchos laguneros que compartieron uniforme con Caldera.
Lanzador cuando se desempeñó como pelotero en diversas ligas, como la de Empleados y Profesionistas, “Teo” aprendió luego las obligaciones de un bat boy y le puso su sello particular; entre semana desempeñaba diversos oficios, pero en sábado y domingo, el uniforme y la gorra de beisbol eran su indumentaria obligatoria. La arenga de “Pleito, pleito” fue su sello característico, buscaba impulsar a sus peloteros y a la propia porra, a subir en el ánimo y a apoyar al máximo, siempre con una sonrisa en el rostro.
Desde ligas amateur, hasta los máximos niveles como Nacionales de Primera Fuerza, Liga Mayor de La Laguna, Liga Premier de La Laguna, Campeonatos Nacionales de Softbol varonil y femenil, siempre “Teo” fue un bat boy con mucho ánimo, mucha “pimienta” y mucho amor por la pelota, tanto como por la vida. Descanse en Paz, “Teo” Caldera.
