'Versailles' y la corte de Luis XIV
Es el año 1667. El rey Luis XIV (George Blagden) tiene 28 años de edad e intenta afianzar su poder absoluto en Francia. El clima en su corte es tenso, pues se ha descubierto una serie de conspiraciones para destronarlo. El monarca decide entonces construir una enorme residencia para vigilar a los nobles rebeldes. Esa jaula de oro será el Palacio de Versalles, donde el romance y la política tendrán espacio para converger en una serie de batallas.
Luis XIV fue la máxima figura del absolutismo (régimen político donde una autoridad domina todas las manifestaciones de poder del Estado). Conocido también como el Rey Sol, su frase “el Estado soy yo” resumía el derecho divino que el monarca creía tener para gobernar desde su nacimiento. Estrenada el 16 de noviembre de 2015 en Canal+, Versailles es una serie de televisión sobre el hombre más poderoso de su tiempo.
Creada por Simon Mirren y David Wolstencroft, se trata de una producción colaborativa entre Francia y Canadá. No obstante, aunque su argumento abarca una arteria vital de la historia francesa y se ha rodado en ese país, se encuentra protagonizada en su mayoría por actores británicos y norteamericanos (aunque también participan algunos franceses), y su idioma original es el inglés, lo que en su momento le valió una serie de críticas. Sin embargo, cabe resaltar el excelso diseño de arte, pues las escenografías y los vestuarios están cuidados hasta el detalle más mínimo.
El guion emplea a figuras clave de la corte de Luis XIV y también se da licencia para inventar personajes ficticios con el objetivo de fortalecer la trama. En este lugar lleno de lujos, las pasiones y las traiciones están a la orden del día.
ANTE LAS CONSPIRACIONES
La primera temporada de Versailles se concentra en presentar a Luis XIV y los demás personajes que lo acompañan. Destaca Felipe I de Orleans (Alexander Vlahos), hermano del rey, quien reprocha muchas de las decisiones tomadas por la Corona, pero a la vez muestra fidelidad férrea y amor hacia su consanguíneo.
Luis XIV, quien quedó traumatizado por la Fronda (la revuelta que realizó la nobleza durante el reinado de su padre), está preocupado, pues sabe que varios nobles intentan traicionarlo y les urge que la corte abandone el pueblo de Versalles y regrese a París. El rey no cede a las presiones y levanta su nuevo palacio, pese a emprender al mismo tiempo una importante guerra contra Guillermo de Orange, rey de Países Bajos.
Pero la política no lo es todo. Durante esta primera parte de la serie se muestra una fuerte tensión sexual. El rey, quien está casado con la reina María Teresa de Austria (Elisa Lasowski), se acuesta con Enriqueta de Inglaterra (Noémie Shmidit), esposa de su hermano, y otras doncellas. Mientras que su hermano Felipe, quien es homosexual, hace lo propio con su amante, el caballero de Lorena (Evan Williams). Se expone así la doble moral que imperaba en la corte, los matrimonios por conveniencia y cómo los nobles leales se movían en el tablero hacia el extremo de la conspiración, y viceversa.
Mientras tanto, Fabien Marchal (Tygh Runyan), personaje ficticio encargado de la seguridad real, investiga sobre las intrigas. Aunque su lealtad es puesta en juego en varias ocasiones, él se mantiene fiel a la causa de abogar por el bienestar de su rey. Otro personaje ficticio importante es el de Claudine Masson (Lizzie Brocheré), una médica que se gana el respeto de Luis XIV debido a su talento y conocimientos, pero que no puede ventilarse tanto por el temor de que sea acusada de brujería. La situación abre debate sobre el acceso limitado que tenían las mujeres a la educación en el siglo XVII.
La primera temporada termina con la muerte de Enriqueta de Inglaterra, quien ha sido envenenada. Además, un personaje femenino comienza a tomar fuerza en este lapso final: Madame de Montespan (Anna Brewster), una de las amantes del rey.
EL ASUNTO DE LOS VENENOS
La segunda temporada se desarrolla en uno de los mayores escándalos que aquejaron a esta corte: el asunto de los venenos. Esto ocurrió entre 1677 y 1682, cuando cientos de adivinos y aristócratas fueron acusados de envenenamientos y brujería.
Aparece entonces el personaje de Madame Agathe (Suzanné Clement), el cual está basado en Catherine Monvoisin, mejor conocida como “La Voisin”, la bruja y envenenadora profesional que implicó a varios miembros de la nobleza en la polémica. En uno de los mejores diálogos de esta temporada, justo antes de morir en la hoguera, Madame Agathe encara al rey y cuestiona su poder, así como la eficacia de su sistema político.
Es destacado el arco de Madame de Montespan, quien había alcanzado gran poder en la corte y al final resultó la principal implicada en este escándalo. Así, se descubrió que ella había adquirido afrodisíacos y asistía a misas negras con el fin de mantener el favor del rey.
El asunto de los venenos se resuelve en la tercera temporada. Madame de Montespan es despreciada, ha muerto la reina y Madame de Maintenon (Catherin Walker) se convierte en la nueva favorita del monarca.
Francia ha derrotado a Países Bajos; parece que por fin Luis XIV va a poder expandir su imperio sin contratiempos. No obstante, el pueblo francés se cansa de pagar impuestos y se subleva, al tiempo que un nuevo enemigo parece amenazar al rey: un prisionero escondido tras una máscara, en referencia al misterioso recluso enmascarado que estuvo encerrado en la Bastilla y a quien Voltaire menciona en su libro El siglo de Luis XIV (1751).
GRANDES AUSENTES
Aunque autores como Voltaire y la historiadora británica Ragnhild Hatton han acentuado la importancia que Luis XIV le dio a la cultura y las artes durante su reinado (periodo al que comparan con otros siglos ilustres), los grandes ausentes de la serie son precisamente los artistas y los intelectuales.
Al contrario de Le roi danse (2000), filme dirigido por Gérard Goebel, ni el compositor Jean-Baptiste Lully ni el dramaturgo Molière aparecen en la serie Versailles. Tampoco existe un personaje que encarne al poeta Jean Racine o a los pintores Charles Le Brun y Pierre Mignard, pese a que todos ellos tuvieron un papel importante en la corte de Luis XIV.
Además de Versailles y la citada Le roi danse, otras propuestas audiovisuales que ayudan a comprender la magnitud del reinado de Luis XIV son los largometrajes Vatel (2000), de Roland Joffé, y La muerte de Luis XIV (2016), de Albert Serra. Así mismo, existe un par de videojuegos educativos lanzados para computadora por Cryo Interactive: Versalles: Complot en la corte del rey Sol (1997) y Versalles II: El testamento (2001). En la actualidad, la serie no se encuentra disponible en streaming para México, pero se puede conseguir en formato DVD o Blue-ray a través de Amazon.