Paulina Meza y Emmanuel Mata.
La afición de los Algodoneros de Unión Laguna volvió a demostrar por qué es el corazón del equipo. Cada juego en el Estadio de la Revolución se llenó de entusiasmo, cánticos y aplausos que hicieron vibrar cada rincón del estadio y motivaron a los jugadores en cada jugada.
La pasión de quienes se acercaron al estadio, quienes pintaron de colores las gradas y contagiaron su energía a todos a su alrededor, es el verdadero motor que mantiene viva la emoción del béisbol en La Laguna.
No importa el marcador ni el inning, su entrega y entusiasmo se sintieron en cada lanzamiento, en cada atrapada, en cada carrera, recordándonos que el espíritu de los Algodoneros no está solo en el campo, sino en cada persona que se emociona, se levanta de su asiento y celebra cada momento como si fuera único.
