
De miedo. Quienes la vean tendrán que cuidarse cuando oigan su lamento espeluznante.
Pasando el 16 de septiembre, muchas personas se olvidan de las fiestas patrias para dar paso a los festejos de Halloween y Día de Muertos, aunque hay quienes ya se andan instalando en la Navidad.
Y para ir a calentando terrenos en cuanto al terror, las plataformas empiezan a lanzar sus propuestas de terror.
Hoy, llegará a Netflix la película, La maldición de la llorona, que arribó a los cines en el año de 2019.
La leyenda mexicana de "La Llorona" cobra vida de nuevo gracias al filme La maldición de la Llorona.
La película fue producida por Emile Gladstone, Gary Dauberman (franquicias de IT (Eso) y Annabelle) y James Wan (universo de El conjuro).
Michael Chaves, que ganó el premio Super Short Film de Shriekfest en 2016 por The Maiden, debutó como director gracias a este largometraje. Los protagonistas son Linda Cardellini, Raymond Cruz, Patricia Velasquez y Marisol Ramírez, entre otros actores.
La Llorona es una leyenda. Una aparición horrible, atrapada entre el cielo y el infierno, sellada por un destino terrible que ella misma se provocó. La sola mención de su nombre aterroriza al mundo desde hace varias generaciones.
En vida, ahogó a sus hijos en un río violento durante un ataque de celos y furia, y luego se tiró, mientras los lloraba. Ahora, sus lágrimas son eternas. Y también letales; quien escuche su llamada mortal en la noche, está condenado.
"La Llorona" se desliza entre las sombras y se alimenta de niños, desesperada por reemplazar a los suyos. Con el paso de los siglos, su deseo es cada vez más voraz... Y sus métodos, cada vez más aterradores.
En el filme ubicado en la década de los setenta, en Los Ángeles, La Llorona acecha en la noche... y a los niños.
Una trabajadora social ignora la inquietante advertencia de una madre afligida acusada de poner en riesgo a su hijo. De pronto, ella y sus hijos se ven arrastrados a un mundo supernatural y aterrador.
La única esperanza para sobrevivir a la ira mortal de La Llorona puede ser un cura decepcionado y el misticismo que profesa para mantener el mal a raya, en los límites entre el miedo y la fe. Quienes la vean tendrán que cuidarse cuando oigan su lamento espeluznante, ya que ella hará todo lo posible por llevarlos a la oscuridad.