La manipulación de ambos conceptos nos genera confusión y desconfianza; democracia es, por definición: "la forma de gobierno en la que el poder político se ejerce para y por el pueblo, a través de la participación directa o indirecta de los ciudadanos"; en tanto, dictadura es: "el régimen político en el que el poder se concentra en una sola persona o un grupo de personas".
Toco el tema porque ahora es manoseado y abusado por los parásitos.
Ambas presentan características que nos permiten distinguirlas y evaluarlas; los politiqueros siempre tratarán de aprovecharlas en su beneficio, pronunciando discursos tendenciosos que nos confunden una y otra postura ideológica.
En la democracia, las decisiones se toman considerando el consenso de opiniones entre lo mejor o inconveniente para la comunidad en cuestión y para ello toman en cuenta las opiniones de expertos, a quienes les piden realicen estudios, incluidas encuestas, que midan el deseo y las necesidades de los ciudadanos.
Las dictaduras, antes de llegar al poder, también toman en cuenta toda la información existente, incluidos datos económicos, salud, escolaridad, etc. y ese conocimiento lo utilizan para construir un discurso que ofrezca alternativas que quieren escuchar los electores.
En ambas, no es extraño que señalen metas imposibles de cumplir, incluso fecharlas, luego olvidarlas o manipular los resultados para su beneficio.
Otra diferencia entre democracia y dictadura es la intencionalidad final: la primera, busca administrar el poder buscando atender las peticiones escuchadas del ciudadano, las necesidades sociales identificadas y acepta proyectos de mejora en servicios.
Los demócratas, saben pedir "¡hasta el sacrificio!" -neoliberalismo- del electorado a fin de cumplir los fines. Su debilidad está marcada por los compromisos adquiridos con sectores económicamente pudientes, quienes les apoyaron para llegar al poder y les exigen correspondencia.
Las dictaduras, una vez alcanzado el poder, transforman sus objetivos para buscar cómo aferrarse a él, aún a costas de tomar malas decisiones en economía, salud, educación y servicios. No dudan en ejercer abusivamente la autoridad conferida, hasta modificar o abolir leyes, todo por alcanzar sus fines: el control absoluto.
El discurso de ambas ideologías políticas está orientado a convencer y para ello, cuentan con expertos en mercadotecnia política que los orientan.
La democracia, utiliza datos y explicaciones reales ante los votantes, aunque comúnmente "retocan" logros para agrandar sus resultados. Medias mentiras/verdades.
Las dictaduras, los utilizan a su conveniencia y no dudan en manipular la información sobre la realidad del estado, hasta mentir, siempre para justificar sus acciones deficientes. Incluso, utilizan el recurso de encontrar responsables -siempre ajenos al movimiento- llegando a detenerlos y encarcelarlos, construyéndoles historietas desacreditadoras.
Todos los políticos buscarán puntos que sean de apoyo a su gestión, resaltando y exagerando éxitos y escondiendo o negando errores. Saben maquillar los resultados y cuentan con mercenarios para ayudarlos a mentir.
La democracia, busca "la menor intervención del estado y la mayor participación ciudadana" como forma de gobernar y atacar problemas; organizan la coordinación con instituciones no gubernamentales, políticas y otras del tipo social en todo el país; aceptan la distribución de los poderes del estado y buscan diálogo y negociación con opositores. Le llaman "cabildeo", aunque en no pocas veces favorecen la corrupción.
La dictadura busca la concentración y centralización del poder en una sola persona, apoyada por sus allegados de confianza y ejerce la autoridad sin consultar a sus ciudadanos. Comúnmente fingen.
Existen otras instituciones totalitarias, caso de las iglesias, donde la verdad se dicta por fe; o las médicas, donde los profesionales dan instrucciones -recetan- por su sapiencia.
De nuevo le escribo sobre los factores humanos: el lado positivo, que busca cumplir la visión ideal de cada cual; y el negativo, cuando promueven romper con moral y ética. Desafortunadamente y por lo general, pesa más el segundo por ser lo más fácil de atender. ¿Va comparando?
También debemos considerar que la administración pública, desde siempre, ha sido infectada por el parasitismo del oportunista; en los últimos tiempos, los politiqueros han logrado desplazar a los pocos políticos de vocación que nos quedaban.
El dictador, con sus seguidores destruyen lo que demócratas verdaderos intentan construir; Considere que muchos, entre aquellos que tienen propósitos e intenciones positivas, caen en la tentación del provecho personal y la corrupción.
Desoyen aquello de: "Errare humanum est, sed perseverare diabolicum", que significa "errar es humano, pero perseverar en el error es diabólico".
Le propongo un ejercicio: mencione 10 politiqueros y luego 5 políticos verdaderos; más interesante aún: enumere 20 corruptos y 3 que crea honestos.
Le invito a reflexionar en nuestro caso y, "con el debido respeto", recuerde que "los pueblos tienen los gobiernos que se merecen".
Ojalá podamos reflexionar sobre nuestra actitud personal en relación con sostener la democracia o fortalecer una dictadura.
¿México y EUA, son democracias que empiezan a convertirse en dictaduras?