En breve: La obesidad en México
La obesidad es uno de los problemas de salud que más preocupan en México. Más allá de la apariencia, esta atención se debe a la baja calidad de vida que tienen quienes la padecen, además de la propensión de desarrollar enfermedades o que se compliquen. Estos son algunos datos que ilustran por qué, para México, es un problema que se debe tratar.
Comparación
La presencia de la obesidad en México se ha disparado en los años recientes. De acuerdo al Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), el México actual tiene el doble de incidencia de obesidad, si se compara con la década de los 80.
Proyecciones
En México, la Secretaría de Salud estima que para el 2024 el 36.9 por ciento de las personas adultas viva con obesidad, y de seguir la tendencia, para el 2030 podría llegar a 45 por ciento. Se estima también que para el 2035 haya, en el mundo, cuatro mil millones de personas con este problema, de no abordarse con seriedad.
Complicaciones de la obesidad
Hay muchos padecimientos relacionados a esta condición. Entre ellos, los relacionados con la diabetes, la presión arterial, pero también con las complicaciones que se pueden desarrollar en enfermedades como influenza o COVID-19.
En infantes
La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que en todo el mundo hay más de 380 millones de niños y adolescentes que viven con obesidad. La Encuesta Nacional de Salud y Nutrición, realizada por el INSP, destacó que la obesidad ha ido en aumento en todos los grupos poblaciones, incluyendo a los niños y adolescentes. En el grupo que se compone de niños que van de los cinco a los 11 años, creció un 7 por ciento su presencia entre 2006 y 2022. Hasta ese año, su prevalencia era de 37.3 por ciento de la población menor de 18 años.
Las causas
De acuerdo a la encuesta antes mencionada, el exceso de peso en la infancia está relacionado con una dieta rica en calorías y grasas saturadas, un desbalance entre consumo y gasto de energía, una vida sedentaria, factores genéticos. Por esa razón, la manera de combatirla es con hábitos saludables, como elegir de una mejor manera la comida (asesorado por un especialista en nutrición, en caso de ser necesario), y tener una constante actividad física, que permita que los menores puedan tener un gasto de calorías apropiado para su edad.
Los efectos
La obesidad infantil está asociada a una mayor probabilidad de desarrollar enfermedades crónico degenerativas, muerte prematura y discapacidad.