Exesposa de 'El Bronco' denuncia violencia del exgobernador de Nuevo León
Rodríguez Calderón se vio envuelto en una polémica que involucra una denuncia de su exesposa.
El exgobernador de Nuevo León, Jaime Rodríguez Calderón, enfrenta un nuevo conflicto legal que no involucra a actores políticos ni a grupos criminales, sino a su exesposa, Adalina Dávalos Martínez.
Ambos mantienen acusaciones y denuncias cruzadas a raíz de una propiedad ubicada en el municipio de García, lo que ha derivado en una confrontación pública y jurídica.
Adalina Dávalos Martínez denuncia violencia de "El Bronco"
El caso tomó fuerza luego de que Dávalos difundiera un comunicado en el que expone su postura sobre la disputa, aunque la controversia se originó por un inmueble, ella afirma que el fondo del problema tiene que ver con su integridad y la de sus hijos.
En su mensaje, detalló que durante el matrimonio habría sido víctima de distintos tipos de agresiones.
“Durante muchos años guardé silencio frente a una serie de acciones de violencia, control y desvalorización que se ejercieron en mi contra dentro de mi matrimonio, ese silencio no fue indiferencia, fue el resultado de vivir bajo el peso de la intimidación, del miedo y del poder, hoy, por mí y por mis hijos, he decidido recuperar mi voz”, señaló.
"No es una disputa por un bien material", señala exesposa de Jaime Rodríguez Calderón
El origen del conflicto se remonta a la separación de la pareja, tras el rompimiento, comenzaron los desacuerdos legales, Rodríguez Calderón acusa a Dávalos de haberlo despojado de la casa ubicada en García, situación que, habría ocurrido en noviembre después de una visita que ella realizó a una carrera de caballos en Coahuila.
Al volver a Nuevo León, ella habría ingresado al domicilio acompañada de familiares, lo que presuntamente generó una confrontación, a partir de ese episodio se desplegaron las denuncias de ambas partes.
Dávalos sostiene que fue el propio Rodríguez Calderón quien tomó la decisión de finalizar el matrimonio, pero afirma que eso no lo exime de sus responsabilidades familiares.
“No reclamo lo que no me corresponde, reclamo lo que es justo, el reconocimiento a mi vida, a mi entrega y al derecho de mis hijos de tener una relación basada en la verdad, esto no es una disputa por un bien material”.
