
La anterior administración federal argumentó “razones humanitarias” para multiplicar el apoyo financiero a Cuba. (ARCHIVO)
El gobierno que encabezó Andrés Manuel López Obrador gastó en 2023 y 2024 el equivalente a 22 millones de dólares en la impresión de los nuevos libros de texto que se reparten en Cuba, revela una investigación de Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI).
Además de los libros de texto, el gobierno de López Obrador entregó millones de litros de gasolina a Cuba y llegó a acuerdos con el régimen de ese país para contratar médicos y comprarle medicinas que nunca repartió. En conjunto, el apoyo otorgado a la isla es cercano a los 400 millones de dólares.
La anterior administración federal argumentó "razones humanitarias" para multiplicar el apoyo financiero a Cuba. En contraste, en México persiste el desabasto de medicamentos y se ha duplicado la población sin acceso a servicios de salud, de acuerdo con la última medición realizada por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).
Esta institución, enfocada en el diagnóstico de la pobreza, fue eliminada en noviembre de 2024 junto a otros seis organismos autónomos bajo el argumento de la austeridad. Su presupuesto anual era el equivalente a lo que la administración de López Obrador gastó en imprimir los libros para Cuba.
Otro órgano eliminado en noviembre fue la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece), encargada de combatir monopolios y cuyo presupuesto era menos de la mitad de lo que el gobierno pasado destinó a la impresión y envío de libros de texto a Cuba.
De un análisis de los contenidos de los libros de texto cubanos impresos y financiados por el gobierno mexicano se desprende que algunos ponen de manifiesto una postura hostil contra Estados Unidos, a quien se presenta como una amenaza para el pueblo cubano e incluso se le acusa de orquestar una guerra biológica para afectar al país.
En el libro de Educación Moral y Ciudadanía acusan al presidente estadounidense, Donald Trump, de haber intensificado la persecución y el bloqueo comercial para asfixiar a Cuba durante su primera administración (2017-2021).
Omara Ruiz Urquiola, cofundadora e investigadora principal del Observatorio de Libertad Académica (OLA), una organización crítica del régimen cubano, afirmó que los contenidos de esos libros tienen una mayor carga de "control ideológico" de la población cubana, y que al haberse financiado con recursos públicos el gobierno mexicano, éste es partícipe de ese adoctrinamiento.
"El gobierno mexicano, una vez probada la existencia de un acuerdo bilateral, está siendo partícipe de acciones de vulneración de la libertad académica, con la agravante de la extraterritorialidad", de acuerdo con la investigadora.
La triangulación
El financiamiento, impresión y envío de los libros involucró a tres dependencias federales: la Comisión Nacional de Libros de Texto Gratuitos (Conaliteg), organismo descentralizado de la Secretaría de Educación Pública (SEP), que encomendó producir los ejemplares a Impresora y Encuadernadora Progreso (IEPSA), empresa de participación estatal mayoritaria, mientras que la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) fue la responsable de enviar por barco, desde el puerto de Veracruz, casi 15 millones de libros.
En la parte final de los libros se señala que fueron impresos en los talleres de IEPSA, en Iztapalapa.
Con la colaboración del Observatorio de Libertad Académica, MCCI obtuvo ejemplares de los libros cubanos financiados por el gobierno mexicano y corroboró que en la página legal de cada volumen aparece la referencia de que fueron impresos en México por IEPSA por encargo de la Conaliteg.
También se obtuvo copia de dos contratos de Conaliteg con IEPSA: el primero es de agosto de 2023 y ampara la impresión de 5.2 millones de ejemplares, mientras que el segundo es de julio de 2024, para imprimir 9.6 millones de libros.
En conjunto, el monto acordado en ambos contratos es por 387 millones 455 mil pesos, que equivale a 22 millones de dólares al tipo de cambio vigente en las fechas en que se acordó imprimir los ejemplares.
Los beneficiarios de los libros, según los propios contratos, son alumnos de los niveles educativos de primera infancia, primaria, secundaria básica, preuniversitaria y especial de la República de Cuba.
El costo de impresión de los libros de texto cubanos, sin contar la logística del traslado, se acerca al desembolso del gobierno mexicano en la contratación de médicos cubanos. The Lancet, la revista británica especializada en temas médicos, reveló que entre 2022 y 2023 el gobierno mexicano gastó casi 24 millones de dólares (equivalentes a 400 millones de pesos al tipo de cambio promedio de esos años) en la contratación de 610 médicos cubanos para atender el déficit en comunidades rurales.
En los contratos de Conaliteg se detalla que el Ministerio de Educación de Cuba pidió el apoyo de México para imprimir sus libros a través de la Agencia Mexicana de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AMEXCID), órgano desconcentrado de la SRE.
"Derivado del trabajo de cooperación de México y la República de Cuba, dicho país solicitó el apoyo de nuestro país para efectuar la impresión de libros escolares, por la carencia de materiales y recursos tecnológicos", se lee en el primero de los contratos.
En atención a esa petición, la Cancillería gestionó ante la SEP la impresión de un total de 268 títulos que van de preescolar hasta nivel preuniversitario. En ambos contratos se lee que los libros fueron pagados por México a petición del gobierno de Cuba.