Lagunero Luis David Llomuri vive gran sueño junto a Fátima Bosch

Las palabras de la tabasqueña, Fátima Bosch, Miss Universo 2025: “Porque los sueños se hacen realidad y porque Dios así lo quiso”, han resonado a nivel mundial desde hace más de 15 días que se convirtió en la cuarta mexicana en ganar la corona. 

Su fe inquebrantable la ha acompañado y en su primer mensaje como Miss Universo mencionó una vez más a Dios, diciendo que él tiene planes para cada persona y eso es inevitable. 

Precisamente, un lagunero se identifica con ese “propósito divino”.  Los sueños del editor y estilista en moda Luis David Llomuri, de 27 años de edad, no tienen límites y, desde la última entrevista que le concedió a este diario, sus metas se han expandido más allá de México. Recientemente estuvo encargado del estilismo de moda de Fátima en su arribo a Nueva York, Estados Unidos, a principios de este mes de diciembre. 

En exclusiva para El Siglo de Torreón, Luis David revivió esta experiencia que marca un antes y un después en su andar profesional y personal, para dar a conocer a los lectores, una vez más, que los sueños sí se cumplen.

1.- ¿Cómo se dio la oportunidad para que pudieras trabajar con Miss Universo?

Sinceramente, siento que todo se dio por propósito divino. Como dijo Fátima, “porque Dios así lo quiso”. Conocí a Juan Alberto Bazan (maquillista) en un evento de networking aquí en Nueva York, y desde ese instante hubo una conexión genuina. Nos reconocimos desde la admiración y el respeto profundo por lo que cada uno hace. Más adelante tuve la fortuna de conocer a Adriana Maurera (productora del proyecto), y juntos formamos un equipo que no solo funcionó… se sintió correcto. Todo fluyó con una armonía hermosa. Hoy puedo decir que esta oportunidad llegó a mi vida a través de personas con un corazón enorme, y les guardo un cariño que difícilmente puedo poner en palabras. Ellos fueron parte del milagro que me trajo hasta aquí.

2.- ¿Qué simbolizó para ti esta experiencia?

Para mí, ¡esta experiencia fue un regalo del cielo! No solo significó un logro profesional enorme, sino una transformación personal. Trabajar con Fátima, la mujer que hoy lleva el nombre de México y que se convirtió en Miss Universo 2025, tocó partes de mí que yo mismo no sabía que necesitaban ser honradas. Siempre he intentado representar a mi país con dignidad, respeto y muchísimo orgullo, pero esto… esto fue diferente. No fue una línea más para mi currículum; fue una línea escrita directamente en mi historia de vida y en mi corazón. Me siento profundamente agradecido con Dios, con la vida y con el universo por acomodar cada pieza para que este momento llegara a mí. Agradecido por las personas, por la oportunidad, por el aprendizaje y por la honra de vivir algo tan grande. Es una experiencia que me cambiará para siempre.

3.- ¿Cuál fue tu labor?

Honestamente, ha sido una de las experiencias más significativas y transformadoras de toda mi carrera. No solo por la magnitud del proyecto, sino por lo que implicó estar tan cerca de un momento histórico para México.

Tuve la responsabilidad y el privilegio de encargarme del estilismo de moda y del cabello de Fátima durante la rueda de prensa y sus primeras apariciones ante los medios después de haber sido coronada. Cada look, cada detalle, cada decisión tenía un peso especial, porque estaba acompañando a una Miss Universo que además representa a mi país.

Nuestra agenda fue intensa. Visitamos lugares que jamás imaginé recorrer en un contexto así: desde la ONU hasta el Consulado Mexicano en Nueva York, desde lo alto del Empire State Building hasta la solemnidad de la Catedral de San Patricio. También estuvimos en entrevistas para Telemundo, Good Morning America y muchísimos medios más.

Acompañarla significó estar atento a todo: su imagen, su energía, su comodidad… y al mismo tiempo absorber la grandeza del momento. Fue vivir Nueva York a un ritmo diferente, con una emoción que todavía me cuesta procesar. Es una experiencia que me marcó profundamente y que llevo en el corazón con una gratitud absoluta.

4.- ¿Cuánto tiempo implicó la experiencia?

Este proyecto tuvo lugar durante toda la visita de Fátima en Nueva York, abarcando cada actividad y aparición que tuvo en la ciudad. Cada día fue intenso y lleno de momentos memorables. Además, implicó un trabajo arduo incluso días antes de su llegada: desde la recolección de los looks, accesorios y calzado, hasta la preparación de cada detalle para que todo estuviera impecable. Espero con todo el corazón que surjan más oportunidades en el futuro para continuar acompañándola y seguir siendo parte de este camino tan especial y significativo.

5.- ¿Cuál es la diferencia de estar detrás del estilismo de una Miss Universo al de una actriz o cantante?

Cada celebridad, ya sea cantante, actor o figura pública, tiene protocolos de trabajo distintos, además de su estilo personal, talla, imagen pública y mensaje o propósito que desea transmitir. Por eso, ningún proyecto es igual; cada uno es único y especial. Trabajar con una Miss Universo implica un nivel de responsabilidad muy particular, porque su imagen representa no solo a ella misma, sino a todo un país. Cada detalle cobra un significado más profundo, y eso hace que la experiencia sea aún más intensa y transformadora.

6.- Trabajar para una Miss Universo, ¿de qué manera impacta profesionalmente para ti? 

Acompañar a Fátima como Miss Universo ha sido mucho más que un logro profesional; ha sido un momento que eleva todo lo que hago como creador y estilista. Esta experiencia me ha permitido demostrar que puedo gestionar proyectos de alto nivel, cuidar cada detalle y transmitir profesionalismo en contextos internacionales, donde cada decisión tiene un significado. Además, abrir estas puertas me ha mostrado nuevas oportunidades y propuestas que me desafían a crecer y explorar mi creatividad más allá de lo esperado. Pero, sobre todo, me llena de orgullo y gratitud poder representar a México, aportar mi talento y ser parte de algo que trasciende, mostrando al mundo la fuerza, elegancia y esencia de nuestro país.

7.- ¿En qué otros proyectos trabajas actualmente?

Actualmente radico en Nueva York, pero tengo proyectos tanto aquí como en París y México, donde desempeño roles de director creativo y director de backstage durante las semanas de la moda en París y Nueva York. Mi labor implica coordinar a diseñadores, modelos, maquillistas, peinadores y asistentes de vestuario, asegurándome de que cada detalle esté perfecto antes de la salida de cada modelo. Cada decisión importa, porque todo el contenido que producimos se publica en las revistas de moda más importantes del mundo, como Vogue, Harper’s Bazaar, L’Officiel y Elle. Cada proyecto es un reto que exige precisión, creatividad y sensibilidad, y al mismo tiempo me da la oportunidad de elevar la moda y el estilismo a un nivel internacional.

8.- Llevar tu talento a contextos distintos, ¿de qué manera te ha nutrido? No solo profesionalmente, sino también a nivel personal. 

Llevar mi talento a distintos contextos, desde Nueva York hasta París, y trabajar con personas de culturas y disciplinas diversas, me ha enriquecido de maneras que van mucho más allá de lo profesional. Cada proyecto me reta a ser más creativo, a adaptarme con sensibilidad y a conectar profundamente con quienes me rodean. A nivel personal, estas experiencias me han enseñado la importancia de la paciencia, la empatía y la humildad, recordándome que el verdadero valor de mi trabajo no está solo en lo que se ve, sino en lo que se siente y en cómo inspira a otros. Cada viaje, cada backstage y cada colaboración me han dejado aprendizajes que llevo en el corazón, moldeando mi visión y mi manera de crear, y llenándome de gratitud por poder vivir este camino.

9.- ¿Qué significa para ti llevar el nombre de Torreón, Coahuila, en alto?

Llevar el nombre de Torreón, Coahuila, en alto es un honor inmenso y una responsabilidad que siento con mucho orgullo. Cada proyecto que realizo, cada logro que alcanzo, no es solo mío; representa a mi ciudad, a mi gente y a todo lo que me ha formado. Estoy profundamente agradecido con mi tierra por enseñarme valores, trabajo duro y pasión desde mis raíces. Poder mostrar al mundo de dónde vengo y que mi talento tiene origen en Torreón es una de las mayores satisfacciones de mi vida, y me inspira a seguir creciendo, llevando siempre conmigo ese orgullo que nunca se apaga.