Las predicciones de Nostradamus atemorizan tras la muerte del Papa Francisco
La muerte del Papa Francisco el 21 de abril de 2025 reavivó en redes sociales una supuesta profecía de Nostradamus sobre un pontífice afroamericano que marcaría el inicio del juicio final y el fin del mundo. Pero, ¿qué tan cierta es esta afirmación y qué dice realmente la profecía?
Aunque se ha atribuido a Nostradamus la idea del “último papa negro” vinculado al apocalipsis, esta interpretación no aparece textualmente en sus cuartetas. Más bien, es una combinación de malentendidos populares y confusiones con otras predicciones, como las de San Malaquías, alimentadas por el misterio que rodea al famoso vidente francés.
La verdad de la 'profecía' de el último Papa
La verdadera profecía del “último papa” proviene de San Malaquías, un arzobispo irlandés del siglo XII. Según sus escritos, existiría una lista de 112 papas desde su época hasta el fin de los tiempos. El último de esta lista, conocido como Pedro el Romano, reinaría durante un periodo de grandes tribulaciones y persecuciones, seguido por el juicio final.
Cuando Jorge Mario Bergoglio, el Papa Francisco, asumió el pontificado tras la renuncia de Benedicto XVI, surgieron rumores de que él podría ser el último papa. Incluso se le llamó el "Papa Negro", tanto por su origen latinoamericano como por pertenecer a la Compañía de Jesús, conocida popularmente como los Jesuitas.
¿Qué es lo que dice la Profecía?
Aunque Nostradamus nunca mencionó explícitamente un “último Papa”, sus visiones sobre el caos en la Iglesia han sido interpretadas como señales del fin de una era. Estas ideas, combinadas con la profecía de San Malaquías, que sí menciona un "último Papa" llamado Pedro el Romano, han dado forma a la noción de un “Papa negro” y el fin de Roma.
Según Nostradamus:
“Después de haber ocupado la sede durante diecisiete años”: La “sede” hace referencia al papado, específicamente a la Sede de Pedro.
“Cinco serán cambiados en un plazo tan revuelto”: Esto podría aludir a la sucesión de cinco papas en tiempos de gran inestabilidad.
“Luego, uno no durará mucho tiempo”: Se interpreta como un pontificado breve.
“Y del joven clero surgirá un gran cisma”: Predice una importante división dentro de la Iglesia, posiblemente liderada por miembros jóvenes del clero.
Estas frases han sido objeto de numerosas interpretaciones, alimentando teorías apocalípticas sobre el destino de la Iglesia.
