
Manejo de la naturaleza nos va ayudar a contrarrestar impactos de las ciudades: Académica
La académica Laura Jaloma López, de la Facultad de Arquitectura de la UNAM, afirmó que "No hay ninguna ciudad que no tenga impacto... no hay ni una porque al final está ocupando espacio, impactando el suelo, ocupando material y por más sostenible que sea (las obras) las están usando".
Sin embargo, señaló que ciudades como las de Europa y algunas de América Latina e incluso de México se han ido adaptando, sobre todo respondiendo a la mitigación del cambio climático.
"Tienen procesos de planeación que nosotros (en México) no tenemos... y eso no quiere decir que no se hayan inundado los Países Bajos o ves lo que pasó con la Dana en España, pero se han ido adaptando..."
Manifestó que se tienen ejemplos también en América Latina, como es el caso de Bogotá donde implementa soluciones basadas en la naturaleza, como la instalación de infraestructura verde y azul, la primera hace referencia a las especies vegetales y la segunda al manejo del agua.
Jaloma López apuntó que en Bogotá las grandes avenidas o las principales tienen jardines de lluvias, los cuales sirven para captar el agua e inyectarla al subsuelo. Entonces se tiene un sistema que va reteniendo, recanalizando y absorbiendo el agua.
Otro ejemplo es el manejo de corredores biológicos para minimizar los gases de efecto invernadero, "Es una suerte de elementos que nos va a ayudar a contrarrestar, mucho o poco, todos efectos e impactos que produce una ciudad"
Planteó que para enfrentar las islas de calor que se forman en las ciudades se tiene que volver a reforestar para cambiar la temperatura que se generan por los pavimentos, los cuales no absorben sino irradian y por lo tanto generan calor.
"Los árboles son geniales para eso... sí en camellones, parte de la banqueta... es colocar este tipo de elementos de "cubresuelos" que permitan no sólo la infiltración, pero también para ir minimizando el área de pavimento duro, del que genera más calor... es aprovechar casi el mínimo rincón".
La profesora de la UNAM declaró que le dice a sus alumnos que la distancia más corta entre A y B, no es la línea recta, sino el "camino más bonito y seguro" ,como diría uno de sus maestros de la Facultad, lo cual tiene que ver con estos elementos verdes y su disposición en el espacio.
Destacó que en Mérida y la Ciudad de México pese a ser un "monstruo" ha habido intentos y resistencias de recuperar los espacios verdes, resaltando que ha sido una iniciativa de la sociedad civil.