En Durango y Veracruz se llevaron a cabo elecciones el Domingo 1º de Junio y los partidos así como sus Dirigencias han externado sus avances y retrocesos en el Mapa Político, lo que nos arroja el Programa de Resultados Electorales Preliminares PREP en ambos casos en relación a la participación ciudadana requiere de un análisis más de fondo, ¿cómo se llega a ésta situación? a pesar de "triunfos y derrotas". Recordemos lo sucedido en la transición Democrática que México empezaba a compartir no sólo a América Latina si no a muchos países del mundo.
Tres Nuevos Partidos habían obtenido su Registro: Morena, Partido Encuentro Social y Frente Humanista, en el Caso de Morena su ideología y plataforma eran de izquierda, se había conformado por ex militantes del Partido de la Revolución Democrática, seguidores y simpatizantes de Andrés Manuel López Obrador su fundador y líder indiscutible. El Partido Encuentro Social como organización política no tenía muy claros sus orígenes, algunos Sociólogos lo ligaron a grupos religiosos y a vínculos diversos es decir, sin una ideología definida.
Por lo que se refería al Frente Humanista, su génesis parecía más ligada a ex integrantes del Partido Acción Nacional, se le llegó a relacionar con el ex Presidente Felipe Calderón, la pregunta obligada entonces era ¿son necesarios más partidos políticos? Fue una realidad que nuestro país empezaba a vivir una transición democrática, el gobierno organizaba las elecciones y el PRI con más de 70 años en el poder, entraba en crisis internas. Mario Vargas Llosa construyó una frase lapidaria para citar el caso de México: "una dictadura perfecta".
Fueron la sociedad, las organizaciones civiles, los propios partidos políticos, años de luchas y Reformas Legales las que construyeron por fín un puente para la defensa del voto, se tenían Instituciones encargadas de organizar y llevar a cabo las elecciones y resolver controversias, los cambios históricos obligan a la conciencia de fines, fueron un triunfo las exigencias de la sociedad tan solo en un sexenio hubo cambios inéditos, la votación que recibió Andrés Manuel López Obrador, el crecimiento impresionante de Morena gracias a los Programas Sociales, la continuidad con Claudia Sheibaum, el golpe al Estado de Derecho han terminado con la Democracia, culpa es de quien ostenta el poder, sin embargo es importante señalar el actuar de algunos partidos políticos y su relación con el alejamiento ciudadano, promesas de campaña que no se cumplieron, el olvido a los grupos vulnerables, una vez obtenidos los Registros algunas Dirigencias Nacionales, se convirtieron en feudos de poder o manejos familiares, manipulando asambleas programas de acción estatutos y plataformas políticas. Nuevamente aparece el abstencionismo, frente a una narrativa oficialista que lo niega, minimiza y oculta, se vuelven a practicar irregularidades que se creía habían desaparecido, acarreos, compra de votos, intimidaciones, la misma fórmula en un contexto distinto.
¿A dónde vamos como país, que valores van a conservar los grupos generacionales? algunos políticos se aferran a una ideación a una gerencia y dividen sin precisa la vieja y la nueva política, ésta utopía destruye y coloca en una encrucijada la Dialéctica de Heráclito no como la lucha universal de contrarios si no como trampa permisible donde ya nada tiene un sentido ideológico, legal constitucional y de Derecho. Con paso firme se va perdiendo la idea de que un voto es el fiel de la balanza, de que una acción tan importante se convierta en un motor de conquista, donde se respeten las decisiones de los votantes y se proyecte el futuro que cada ciudadano desea para abrir las compuertas de una vida mejor, hay una gran falta de cultura política, de convicción social para participar con entusiasmo en los procesos electorales es muy complicado pensar en un plazo determinado, la Democracia ya no está en nuestra agenda, sólo nos resta enterarnos en que regiones del planeta se promueve con dignidad y gobiernos y sociedad están dispuestos a respetar los resultados.