¿Qué son las rifas colombianas ligadas al asesinato de empresario en Zapopan?
El empresario fue víctima de un violento ataque en las calles de Zapopan, Jalisco.
Este pasado lunes, el empresario Alberto Prieto Valencia, también conocido como "El Prieto", fue asesinado a plena luz del día mientras se desplazaba en su vehículo tipo Lamborghini Urus por las calles de Zapopan, pues un comando armado de más de 30 sicarios dispararon en contra de su auto, causando su muerte, así como la de su hija de 16 años y uno de sus escoltas.
Salvador Zamora, secretario general de Gobierno de Jalisco, señaló que la Fiscalía del Estado ya se encontraba trabajando para esclarecer los hechos, donde no descartó una posible relación de Prieto Valencia con las rifas colombianas ilegales.
¿Qué son las rifas colombianas y cómo funcionan?
Aunque a simple vista se presentan como rifas populares, su funcionamiento dista mucho de un sorteo convencional, comerciantes y locatarios relatan que la venta de boletos no es opcional, personas ajenas a los negocios llegan de manera periódica y ofrecen boletos con precios que pueden alcanzar los 20 pesos, dejando claro que negarse puede traer consecuencias.
Estas llamadas “rifas colombianas” son organizadas por redes integradas principalmente por personas de origen colombiano, que operan en alianza con autores locales, uno de los puntos donde se ha documentado con mayor claridad su presencia es el Mercado de Abastos de Guadalajara, una de las zonas comerciales más grandes y concurridas del país.
En la práctica, el boleto funciona como un comprobante de pago de extorsión o derecho de piso, aunque se promete la posibilidad de ganar premios como dinero en efectivo, autos o electrodomésticos, comerciantes aseguran que estos rara vez se entregan.
De manera ocasional se reparten premios menores, lo que sirve para mantener la apariencia de un sorteo legítimo y sostener la participación forzada.
La venta de boletos está documentada al menos desde 2021, de acuerdo con información publicada por el portal "Mural", aunque existe información que advierten sobre este esquema desde 2019.
Las rifas también están vinculadas con los préstamos conocidos como “gota a gota”, un sistema en el que los deudores pagan intereses diarios muy elevados, quienes caen en estas deudas suelen ser obligados, además, a comprar los boletos como parte de las presiones.