Desde los tiempos de Hugo Chávez en el poder, mucha gente se preguntaba porque Estados Unidos permitía que un líder tan detestable gobernara a sus anchas e impusiera en Venezuela un régimen dictatorial de izquierda similar al de Cuba.
Era difícil entenderlo si consideramos que Norteamérica ha intervenido cuantas veces ha querido en los gobiernos latinoamericanos, en ocasiones para bien y en otras para mal.
Hoy que Nicolás Maduro lleva doce años en el poder y que ha llevado a Venezuela prácticamente al peor escenario de su historia, todos nos preguntamos como es posible que un régimen tan nefasto y tenebroso mantenga el poder luego de tantos tiempo.
Hugo Chávez tomó el mando en 1999 y lo dejó en el 2013 al morir por una enfermedad de cáncer, desde entonces la dictadura venezolana acumula 26 años con resultados nefastos.
Con Chávez se lograron algunas mejoras en materia de crecimiento y reducción de la pobreza gracias en buena medida al incremento en los ingresos petroleros, pero en los últimos años Venezuela vive un colapso social y económico nunca antes visto.
Mientras el PIB se mantiene a niveles de los años 90, la inflación se ha disparado del 85 por ciento en el 2024 a más del 100 por ciento en el 2025 al tiempo que la moneda se ha devaluado dramáticamente en los últimos años lo que ha generado un empobrecimiento generalizado de la población.
El sistema económico basado en dádivas y apoyos sociales reventó con la baja en los ingresos petroleros y la baja productividad del país, a ello hay que agregar la grave inseguridad social además del arruinado sistema de salud, el desabastecimiento de productos y el deterioro de los servicios públicos.
Uno de los problemas más graves ha sido el éxodo masivo de venezolanos desde que Chávez asumió el poder, se calcula que unas 8 millones de personas han dejado el país cuya población actual se calcula en 28.5 millones de habitantes.
La situación se agrava por le hecho de que un alto porcentaje de los emigrantes son profesionistas y empresarios que optaron por dejar la dictadura socialista y buscar nuevas opciones para vivir, trabajar e invertir en países como Estados Unidos, Canadá y España, entre muchos otros.
Antes de la llegada de Chávez, el país vivía una economía más sólida y próspera, efectivamente había mucha pobreza, marginación y un alto nivel de corrupción en el sector público y privado, muy similar al que ocurre en México.
Sin embargo, Venezuela crecía y mantenía además un sistema democrático con elecciones periódicas y alternancia del poder entre los distintos partidos.
También se respiraba un buen ambiente en materia de libertad de expresión y de respeto a los derechos humanos. Pero Chávez, como buen líder populista, engañó al pueblo venezolano y se aferró al poder, hubiera sido un nuevo Fidel Castro de no ser por la muerte que lo sorprendió a los 58 años de edad.
De vuelta al tema inicial tenemos que el gobierno de Donald Trump pareciera decidido a derrocar a Maduro por las buenas o por las malas. Lo ha presionado desde meses atrás a través del envío de portaviones a las costas de Sudamérica y los ataques aéreos sobre lanchas que supuestamente transportan drogas desde Venezuela.
Pero algo no concuerda del todo, ¿cómo es posible que Trump entable una llamada telefónica en aparentes términos cordiales con Maduro cuando se trata de uno de sus peores enemigos y quien oficialmente es considerado el jefe del cártel de Los Soles y por quien Estados Unidos ofrece una recompensa por 50 millones de dólares?
En estos momentos cuando la opositora al régimen de Maduro, María Corina Machado viajó a Oslo, Noruega, a recibir el Premio Nobel de la Paz, pareciera que el escenario internacional está listo para un cambio de poderes en Venezuela que sería sin duda aplaudido por millones y millones de personas en el mundo entero.
Mejor todavía si se lleva a cabo de manera pacífica y negociada, entre el dictador Maduro y el gobierno yanqui, sin embargo no vemos todavía cuando y como podría concretarse esta operación de alta política.
¿Logrará Trump su cometido y derrocar a Maduro o cómo ha sucedido en épocas anteriores el petróleo venezolano será utilizado para conseguir prebendas a favor de la abominable dictadura socialista?
NOTICIA FINAL…
Es lamentable que el querido pelotero mexicano Fernando Valenzuela, fallecido el año pasado, quedara fuera del Salón de la Fama en su tercer intento de llegar al recinto de Cooperstown, Nueva York. "El Toro" tuvo récord de 173-153 en ganados y perdidos, efectividad de 3.54, 2,074 ponches, seis veces All Star, ganador de Serie Mundial y del Premio Cy Young en 1981. ¿Algo más se requiere para reconocer la fama que ya goza el sonorense?
