Entrega Simas Torreón actualización del proyecto de la planta tratadora con ajustes en costos por inflación y aranceles. (EL SIGLO DE TORREÓN)
El Sistema Municipal de Aguas y Saneamiento (Simas) Torreón ha estado trabajando en la planificación de una nueva planta tratadora de aguas residuales para la ciudad, en este año se hizo una actualización del proyecto debido a cambios en normas y parámetros, además de ajustes por inflación y aranceles.
Roberto Escalante González, gerente general de Simas, explicó que la última versión revisada del proyecto se está presentando ante la Comisión Nacional del Agua (Conagua), siguiendo un cronograma de entregas. Aseguró que el objetivo es mejorar la gestión del agua y cumplir con las regulaciones ambientales más recientes.
Recordó que el proyecto de la planta tratadora de aguas residuales en la ciudad ya se había presentado ante el consejo de Simas en 2023. Sin embargo, en marzo del presente año se realizó una actualización debido a modificaciones en algunos temas como son las normas y parámetros, además de los costos por la inflación y los aranceles.
Mencionó que la última entrega de documentación se realizó recientemente y la siguiente está prevista para julio o agosto. Indicó que la primera etapa del proceso ya cumplió con la entrega de bases y otros documentos de licitación en tiempo y forma. Sin embargo, dijo que aún no se tiene un presupuesto definitivo, ya que depende de los ajustes económicos y la aprobación de Conagua. Aseguró que, una vez determinado el nuevo monto, se dará a conocer oficialmente.
El gerente dijo que el tiempo límite para completar la planta sigue siendo este año, pero hasta ahora se han cumplido todas las fechas establecidas por Conagua. Mencionó que, de ser necesario, se solicitará más tiempo, aunque el proceso avanza dentro del cronograma estipulado.
Escalante González aclaró que este proyecto es independiente de la línea de crédito de 60 millones de pesos que está gestionando Simas Torreón, que ya fue autorizada por el consejo general.
Según los datos preliminares, la nueva planta ocuparía unas 20 hectáreas dentro del ejido Rancho Alegre, donde actualmente se encuentra la infraestructura de tratamiento de aguas residuales. La estimación inicial era que la inversión rondaría los 600 millones de pesos.
