¿Por qué Profeco suspendió el hotel de Roberto Palazuelos en Tulum?

Para la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) no existen destinos o establecimientos intocables cuando se trata de proteger la economía de los mexicanos. Su golpe de autoridad más reciente fue dado en Tulum y entre los establecimientos sancionados se encuentra el hotel Diamante K en Tulum, perteneciente a Roberto Palazuelos. 

La Profeco suspendió al hotel del empresario y actor mexicano debido a incrementos injustificados en los precios de servicios turísticos y productos básicos. 

Profeco suspende hotel de Roberto Palazuelos y otros complejos

De acuerdo con la institución, la suspensión del hotel de Roberto Palazuelos se dio como parte de una verificación de establecimientos en el centro de Tulum y del Parque Jaguar. En el inmueble se identificaron diferencias significativas en tarifas hoteleras y diversas violaciones a la normativa vigente. 

Entre los hallazgos de la Profeco se detectó que la habitación doble más cara de la zona era la del hotel Diamante K con un precio de $13,860 pesos por noche, una cifra por encima del promedio de la zona, que se aproxima a los 4 mil 772 pesos.

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Principales violaciones a los derechos de los consumidores encontradas en Tulum

El Hotel Diamante K y los complejos  Pocna Tulum, Villa Pescadores y Cabañas Playa Condesa Tulum también se hicieron acreedores a sellos de suspensión debido a diversas violaciones a la Ley Federal de Protección al Consumidor (LFPC) pues no exhibían tarifas, no contaban con términos y condiciones de prestación de servicios, inducían al pago de propinas y no entregar comprobantes del servicio.

Durante la verificación en dichos establecimientos también se encontraron menús sin precios exhibidos, en moneda extranjera o en idiomas distintos al español; prácticas, que de acuerdo con Profeco vulneran los derechos de los consumidores y representan una infracción que amerita la suspensión inmediata. 

Esta no es la primera vez que Tulum se encuentra en el ojo del huracán por sus precios excesivos, aunque diversos turistas ya habían vetado a la zona turística, ahora la Profeco pudo recabar información clave sobre sus incumplimientos y precios exorbitantes. 

El monitoreo detectó que un guacamole se podía vender hasta por $280 pesos, una hamburguesa en $400 pesos cada una, al igual que una simple orden de tacos de asada, pastor o bistec.

Tras el informe de la Profeco está compartió que se mantiene atenta a orientar y defender los derechos de las personas consumidoras en este sitio turístico y en todo el país.

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